Déjanos un comentario

sábado, 10 de abril de 2010 | By: Kizoku Nozomi

1º - Extrañas desapariciones

Buenas noches a todos.
Vengo aquí a dejaros la primera parte. Aunque se vea larga su 95% es diálogo siempre, por lo que no es una lectura pesada.

Añado que para que sea menos pesado aún, los personajes más importantes están puestos con un color propio; los demás se verán de un gris oscuro, que se diferencie del negro del texto narrativo.
Textos puestos entre parentesis en el diálogo se interpreta también como la acción misma del personaje. Si el paréntesis está fuera de diálogo es para aclarar algún detalle.
Frases que diga un personaje entre comitas "-" es su pensamiento.
He pensado no quitar muchas expresiones usadas por messenger para no explicar con palabras el estado de uno, que se vea en ese instante cómo se siente el personaje. Cosa que veo que también agiliza la lectura.

Cualquier cosa que salga en la historia que sea motivo de duda, de explicarse, será puesto en otra entrada.

La Aventura: Extrañas desapariciones

El día se presentaba tranquilo para la mayoría de Rokuganeses a mediados de 1208, aunque un cierto silencio en el ambiente inquietaba a algunos.
Dos samuráis, por separado, llegaron a un pacífico pueblo granjero de tierras león, Ninkatoshi, dicha la ciudad del permiso. (L9)

Estaban allí para investigar qué sucedía. Hacía unas pocas semanas llegaron a unos pocos oídos que estaban desapareciendo samuráis del clan del León por desconocidas causas. Por miedo a que llegara a más y sospechas de quiénes podrían ser, fueron mandados allí.
Cada uno tenía sus fuertes creencias y un deber que cumplir para no desobedecer a su daimyô.
“-Ya tiene que ser importante para que un Grulla como yo deambule por estas tierras. ^^U” – pensó uno.
“-Yo soy un autómata, como si me dicen que me tire de un monte. Tengo que probar que no soy un cobarde.” – pensó el otro.
El pueblo se veía muy normal, con sus casas, su plaza, su posada con taberna, sus campos de cultivo.

Ambos samuráis, sin saber uno del otro, observaban el pueblo. Estaba muy tranquilo y silencioso. Los campesinos no parecían estar contentos.
Souji: Qué tranquilo se ve todo ^^U -se acercó a un campesino- Disculpe señor. ¿Sabe algo sobre desapariciones de samuráis en estas tierras?
El campesino miró con temor y cierto rencor al mismo tiempo.
Campesino: No… No sé nada… lo siento. -hizo una reverencia y se fue.
Souji: Qué raro ^^U ¿Qué estará pasando aquí? -se dirigió hacia la plaza.


Mientras tanto, el otro samurai, del clan Cangrejo, se acercó a otro campesino.
Kentaro: ¡¡Disculpa amigo!! ¿Me puede indicar dónde está el jefe de la aldea?
El campesino lo miró con desprecio y temor, quizás su estatura ayudara ese temor.
Campesino: El jefe… El jefe ya no está… pensé que alguien como usted lo sabría…
Kentaro: ¿No? Demonios… ¿Y eso? ¿Quién se encarga del pueblo?
El campesino cogió miedo, temeroso de hablar y que sucediera algo.
Campesino: Lo… Lo siento… No puedo hablar. -y se fue.
Kentaro: Eeeeeeh… ¡¿Pero qué le pasa a esta gente?! “-Será mejor que vaya a la taberna.”
Souji llegó a la plaza donde vio mucha gente reunida y se acercó para escuchar. Pudo oír una disputa entre dos grupos de gente que parecían estar en contra y a favor del jefe.
Gente en contra: ¡¡Maldito jefe!! ¡¡Desaparece y nos pasa de todo!! ¡¡Dónde se ha visto eso!! ¡¡Seguro que ha sido él el causante de las desapariciones!!
Gente a favor: ¡No seáis bastardos! ¡El jefe nunca haría algo así! ¡Tendrá sus razones!
Gente en contra: ¡Bah! ¡¡Su sobrino sí que parecía bueno!! ¡¡Pero también ha desaparecido!! ¡Maldición! ¡No podemos hacer nada! ¡Estamos condenados!
Kentaro, que pasó por allí para ir a la taberna, pudo escuchar todo aquello también.
Souji: ¿Qué es lo que ocurre? -preguntó acercándose al grupo.
Todos le miraron con desprecio. Los que estaban en contra marcharon corriendo; los demás, para evitarse problemas, le ignoraron.
Souji: Parecen odiar a los samuráis ¿o es cosa mía? ^^U
Kentaro: ¡EEE! ¡QUÉ DEMONIOS OS PASA PANDILLA DE COBARDES! ¡EL SAMURAI HIZO UNA PREGUNTA! ¡¿QUÉ PASA EN ESTE CONDENADO PUEBLO?! ¿DE QUÉ TENÉIS MIEDO?
Los campesinos por norma general respetaban mucho a los samuráis, pero uno de ellos a distancia mencionó:
-¡¡Que todo iría mucho mejor sin vosotros, los samuráis!! ¡¡Sois unos despreciables!! -y corrió como si le persiguiera el diablo.
Kentaro: …… ¡HE VENIDO COMO EMISARIO DEL CLAN CANGREJO PARA AYUDAROS! ¡CONFÍAD EN MÍ! ¡¿QUÉ ESTÁ SUCEDIENDO?! ¿DÓNDE ESTÁ EL JEFE?
Pero nadie respondió. Souji fue a su vera al ver que era otro samurai.
Souji: Disculpe señor del Clan Cangrejo.
Kentaro: ¡YO! Qué pasa compañero.
Souji: Permítame que me presente, soy Souji Kakita. Le agradezco que aunque no de la mejor forma, me haya ayudado en esa situación.
Kentaro: Jajajajaja, de nada camarada. ^___^ Yo soy Kentaro Hida.
Souji: Es un placer señor Hida. ^^
Kentaro: ¿Qué hace un samurai en una aldea de campesinos?
Souji: Eso mismo me estaba preguntando yo. Aunque al parecer a usted le enviaron para investigar qué pasa aquí…
Kentaro: Sí… Esas desapariciones… Algo raro pasa por aquí… ¿Has podido averiguar algo?
Souji: Así que hemos venido por lo mismo… No… Desafortunadamente sólo sé que el jefe de aquí también ha desaparecido y que esta gente no simpatiza mucho con nosotros… Me pregunto qué tipo de persona es el jefe…
Kentaro: Maldita sea… Yo estoy igual… A saber… Propongo que trabajemos juntos, dos pueden más que uno y al fin y al cabo hemos venido a hacer lo mismo.
Souji: No es mala idea… Para que haya gente de otros clanes aquí… y para qué engañarnos… Tener un amigo de tu misma profesión me alivia estando en un sitio donde te rechazan. ^^U
Kentaro: Hecho pues… Ahora nos queda cómo conseguir algo de información.
Souji: Si los aldeanos no colaboran…
Kentaro: No apruebo el uso de violencia con civiles, pero esta gente me está sacando de quicio…
Souji: No sería buena idea... recuerda que es gente que trabaja en mayor o menor medida para el emperador y son quienes nos proporcionan la comida entre otras cosas. ^^U
Kentaro: También podríamos probar en la taberna. Los borrachos tienen la lengua muy suelta.
Souji: Bien, vayamos ahí aunque yo no soy de beber. ^^U
Kentaro: Tranquilo, tengo buen fondo. Tú te encargas de las preguntas y yo de emborracharlos. xD
Souji: Nunca escuché un plan así de un samurai. Pero a fin de cuentas no será nada malo si ayudamos a Rokugan. ^^U Vayamos.
Fueron juntos a la posada-taberna donde el posadero les invitaba a entrar aunque tampoco les miraba muy bien.
Posadero: ¿Qué deseáis señores?
En la taberna había varias mesas con una o dos personas exceptuando en el centro donde había un grupo reunido bebiendo y alborotando.
Kentaro: ¡¡JAJAJA, UNA DE SAKE PARA MÍ Y MI COMPAÑERO!!
Souji: ^^U ……
Kentaro: (cuchicheo) Aunque no bebas, simula que lo haces para no levantar sospechas.
Souji: (cuchicheo) De todos modos cantamos mucho que somos samuráis. ^^U
Kentaro: Ahí llevas razón.
Souji: Pero tengo un plan.
Kentaro: Dime.
Souji: No podemos fingir que no somos samuráis, más sin embargo, podemos ponernos del lado de los aldeanos para sacarles información. Puedo aprovechar que soy Grulla para que vean cuan odio al clan del León.
Kentaro: De acuerdo, sentémonos cerca del grupete abundante. (Cuchicheo) Juntos serán más confiados. xD
Souji: Sí, tú eras mi amigo de grupo y tuvimos un contratiempo con un León, por lo cual yo aún les odio mas.
Kentaro: Ok, y perdimos un compañero, eso le da más dramatismo xD
Souji: De acuerdo ^^ Sentémonos.

Ambos se sentaron en una mesa al lado donde estaba el grupo central. Ese grupo era muy escandaloso, reían fuerte y hablaban a voces, enojados en ciertas ocasiones al hablar de cosas que sucedían. Al ver a ellos dos, callaron de golpe, mirándolos fijamente, otro agachaba la cabeza.
Kentaro: ¡¡Malditos Leones!! ¡Si los tuviera aquí enfrente, los aplastaría! -bebe fuerte.
El grupo puso atención a lo que decían ellos.
Souji: Señor Hida, no hemos venido a formar escándalo y mencionar cuan odio tenemos a los Leones. Así sólo los harás huir de nuestro lado. -simuló que bebía un poco.
Kentaro: Es cierto, discúlpame Souji… Es que es acordarme de lo que nos pasó y… (bebe y mira al grupo) ¿¿Qué son esas caras largas, amigos?? ¡Vamos animaros! ¡Mesonero! ¡Una ronda para los compañeros! ¡Invito yo!
Grupo de la mesa: (cuchicheando aunque se les podía oír perfectamente) ¡¿Pero de qué van estos?! ¿¿Quiénes son??
Souji: No debemos dejarnos llevar por las emociones, amigo.
Kentaro: Tienes razón, al fin tenemos un rato de descanso. Relajémonos. Juguemos a los dado ¿te parece? Así dispersaremos un poco la mente. ¡¡MESONERO ¿TIENE DADOS?!!
Souji: Así es, todo a su tiempo. Juguemos. Cuando me encuentre con un samurai León, sea de donde sea, ya nos veremos las caras duramente.
Los hombres de la mesa, al escucharles, se levantaron y se dirigieron a ellos.
Grupo: ¿Venís a matar a samuráis León?
Souji: (Mirándoles casi sin girarse.) Pudiera ser... Depende de cuan útil me sea para alcanzar a ESE León...
Kentaro: ¡SÍ! ¡Nos encargaremos de esos cobardes! ¿Por? (bebe otro trago)
Grupo: (cuchichean entre ellos y les miran) ¡¡¡Pues si encontráis al jefe de aquí y lo matáis, estaríamos agradecidos!!! ¡¡Sí!! Era un antiguo comandante León muy bueno, pero hace unas semanas se volvió corrupto, aunque hay mucha gente que no quiere verlo.
Kentaro: ¿Corrupto dices?
Souji: ¿A qué es debido eso?
Grupo: Ehn sí... nosotros somos los primeros que no nos hace gracia que vengan samuráis de fuera para matar a un León... pero... Pero aún queremos menos perder las vidas.
Kentaro: ¡Contad con mi espada! (bebe) ¡Más sake!
Souji: Señor Hida, espero no beba demasiado por si tuviéramos que batallar pronto. Esto parece mas serio de lo que imaginaba.
Kentaro: ¡No te preocupes Kakita! ¡Ya te dije que tengo buen fondo, buajajajaja!
Grupo: Realmente no sabemos exactamente porqué ha pasado... fue de la noche a la mañana... y la gente empezó a desaparecer... el sobrino del jefe, también es samurai... se le veía buena persona pero desapareció... igual que otros samuráis de la zona…
Souji: ¿Es por ello que no veis bien a los samuráis que vienen?
Grupo: .... exacto... no sólo desaparecían sino que los secuaces del jefe también se corrompieron.
Kentaro: ¿Pero por qué llegasteis a la conclusión de que son corruptos? Pudo atacarles una manada de lobos y por eso no volvieron ¿no? O mil cosas…
Grupo: .... los desaparecidos ya no sabemos de ellos... los corruptos hacen fechorías y hay gente del pueblo que ha desaparecido por su causa.
Souji: ¿Unos samuráis atacando a un pueblo? Parece más cosa de bandidos.
Kentaro: Sí, en todo caso serían ronins. Los samuráis nos movemos por un código de honor; no está en nuestras normas a atacar a inocentes.
Grupo: Por eso no entendemos este cambio y nos ha molestado mucho. No podemos hacer nada porque uno intentó avisar a otro pueblo... y lo mataron.
Kentaro: ¿Podéis contarnos más sobre los corruptos? ¿Dónde podemos localizarlos y apañarles las cuentas?
Grupo: En cuanto sepan que vosotros dos estáis aquí, no dudarán en venir a mataros también.
Kentaro: ¡Que vengan! ¡¡Malditas ratas!! (bebe)
Grupo: No sabemos dónde están… Sólo podemos quedarnos aquí…
Uno del grupo se marcha con lágrimas en los ojos recordando su familia. Los demás prefirieron dejar el tema y marcharse pues ya era tarde.
Hombre del grupo: Cuidaos mucho. No tengo esperanzas que dos samuráis arreglen eso, pero os deseo suerte.
Souji: Gracias, igualmente. No se preocupe.
Kentaro: Adiós amigos. Maldita sea, ahora sabemos la historia pero no me aclararon dónde buscarles. (se dirige al mesonero) Oiga ¿qué aspecto tienen esos corruptos de los que hablaron? (bebe)
Mesonero: ¿Los corruptos? Aspecto como el vuestro, señor… sólo que son del clan del León. Aparentan ser samuráis normales y corrientes.
Kentaro: Comprendo. (le dio una pequeña propina algo ofensiva).

Era noche de luna llena, ellos dos se quedaron en la taberna de la posada.
En las afueras del pueblo, un curioso nezumi deambulaba por allí. Razones como las de los dos samuráis, le llevaron a investigar esas tierras. No le interesaba el tema sobre los samuráis humanos, pero sabía que si pasaba algo grave con ellos, podía pasarle a su tribu.
Pronto escuchó el galopar de un caballo dirigiéndose al pueblo. Pudo ver que sobre él iba un hombre encapuchado y, aunque difícil, pudo ver que también portaba una katana.
Decidió ir tras él a pesar que iba en caballo y le llevase mucha ventaja. Al poco vio cómo el caballo pasó por la plaza y se detuvo delante de la posada. El hombre bajó del caballo y entró en ella.
El nezumi recuperó un poco el aliento y decidió entrar en ella a sabiendas de que no podría alojarse por insuficiente dinero.
Kentaro y Souji vieron cómo ese hombre encapuchado entraba y tras intercambiar unas palabras con el posadero, subió arriba. Justo entonces vieron entrar a un nezumi que parecía estar curioseando.
Souji: ¿Hm? ¿Qué pasa aquí? ^^U
Kentaro: JAJAJAJA ¡¡UN NEZUMI!! ¡QUÉ HACES POR ESTAS TIERRAS, CHIQUITÍN! ¿TE HAS PERDIDO?
Souji: ¿Chiquitín? ^^UUU
Shion: Oh vaya, qué energía así por la noche (se rasca la barbilla)
Kentaro: SIENTATE CON NOSOTROS BUAJAJAJA.
Souji: ^^UUUUU (al Grulla no le hacía gracia ninguna las ratas)
Kentaro: TE INVITO A UNA COPA.
Souji: Armas mucho jaleo… ^^U
Kentaro: (cuchicheo) Disculpa, me dejé llevar xD
Souji: No sabía que te emocionase tanto ver un nezumi. ^^U
Kentaro: Son simpáticos. Los cangrejos no tenemos problemas con las otras razas. Excepto con esos bastardos de la Araña.
Souji: Qué suerte… supongo…
Shion: Oh, tanta amabilidad con un desconocido. De veras lo aprecio…
Shion se fue a sentar con los dos samuráis.
Kentaro: BUAJAJAJA ¿Cuál es tu nombre, roedor?
Shion: Ah… mi nombre es Shion. Shion de Agarra la pata.
Souji: ^^UUUU Con Shion me vale.
Kentaro: ¿Agarra… la pata? Desde luego tu gente es original BUAJAJAJAJA.
Souji: No seré un maleducado a pesar de todo. Señor Shion, yo soy Souji Kakita. Y aunque le parezca increíble, conozco al señor Hida desde hace un rato ^^U
Shion: Es todo un placer mister Kakita.
Souji: No, no es nada ^^U.
Shion: Tabernero, sírvame por favor.
Kentaro: MÁS SAKE PARA MI COLEGA. ¿y qué te trae por aquí, Shion?
Shion: He venido aquí por ciertos rumores que se han extendido allá por nuestras tierras.
Souji: ¿Qué tipo de rumores?
Kentaro: ¿Y bien?
Shion: Pues… se comenta algo sobre desapariciones de samuráis. La verdad no dispongo de mucha información al respecto… por eso vine aquí.
Kentaro: No me digas que tú también…
Souji: Impresionante... para que hasta un nezumi venga por esa razón... me escama de veras qué puede estar pasando....
Kentaro: Dios, esto es gordo si hasta los nezumi se involucran…
Shion: Aunque ahora que lo pienso… En realidad he llegado aquí persiguiendo a un hombre que ni tan siquiera conozco.
Kentaro: ¿Qué hombre?
Souji: ¿El encapuchado que entró?
Shion: Sí, ese mismo. Pero al entrar usted me invitó tan gracilmente a un trago que olvidé por completo el porqué había entrado aquí.
Kentaro: Jajaja, ya veo.
Souji: ¿Estaría bien preguntar sobre ese hombre? ^^U
Kentaro: Pero ¿por qué le seguías? ¿Viste algo sospechoso en él?
Souji: Que vaya encapuchado ya es misterioso ^^UUU
Kentaro: Cierto, es nuestra mejor pista de momento.
Souji: Eso es que esconde su identidad.
Shion: Pude distinguir que portaba una katana.
Kentaro: ¿Estaba armado? Ajá.
Souji: Vaya…
Kentaro: Creo que deberíamos hacerle una visita a nuestro hombre encapuchado misterioso.
Souji se dirigió al posadero mientras Kentaro bebía y ponía su copa al lado de la de Shion con cara de brindar.
Souji: Disculpe ¿podría decirme quién es el señor encapuchado?
Posadero: Según él... un viajero que pasaba por aquí como vosotros...
Souji: Un viajero… ^^U
Shion: Interesante… (se rasca la barbilla)
Souji: ¿Y sería tan amable de decirme en qué cuarto se hospeda?
Kentaro “-Qué educado y qué bien habla Kakita, joder, qué sería de nosotros sin él. xD”
Posadero: No tengo permiso a hacer ese tipo de servicio señor, a menos que sea por algo importante o conozca a la persona.
Kentaro se levantó tambaleándose yendo hacia ellos.
Kentaro: Oh, vamos ¿somos amigos o no somos amigos?
Souji: ¿Y no podría hacer una excepción hoy? Quisiera poder hablar con él ahora por si también pudiera saber algo sobre lo que sucede. Le prometo no armaré ningún tipo de alboroto. Si es así, pagaré todas las consecuencias, me hago responsable.
Shion: También podríamos esperar al alba.
Kentaro: Sin resaca trabajo mejor.
Posadero: Vaya... pero si el hombre se enoja no será mi culpa ù_ú Así que usted se hace responsable. También es cierto. Pero bueno, el hombre esta en la última habitación a la derecha del piso de arriba.
Kentaro: No tenemos tiempo que perder. Ahí estamos.
Souji: Muchas gracias, señor. Que los kamis te bendigan. ^^
Shion: Hmmmm… Así pues fue fácil después de todo.
Souji: Hay que tratar bien a la gente ^^U es lo que aprendí.


Los tres subieron al segundo piso en busca del hombre encapuchado.
Kentaro: Lo mejor será que le cojamos por sorpresa, indefenso y hacerle cantar. Puede ser uno de los tipos que en teoría venían a matarnos. Toda precaución es poca.
Souji: Cierto. Ya es casualidad que haya asomado por aquí a estas horas de la noche.
Kentaro: Tú no lo oíste, roedor. Pero los aldeanos dijeron que no tardarían en atacarnos sólo por ser samuráis investigando.
Shion: Hmmm… Aún así ¿hospedarse en un sitio tan concurrido…?
Kentaro: Sí, desde luego si es así, es un chapuzas. Pero más vale prevenir.
Souji: ¿Entonces pretendes picar a la puerta como alguien normal? XD
Kentaro: No, irrumpamos. (saca su Zanbatou yendo hacia el cuarto)
Shion: Vaya… De verdad no me gusta hacer las cosas así.
Antes de que pudieran detener a Kentaro, éste con su fuerza bruta tiró al suelo la puerta como si nada.
Souji: Olvidé que era un Cangrejo ^^U Y pensar que le dije al posadero que no armaría alboroto…
Shion: … vamos allá…
Tras haber tirado la puerta, Kentaro fue sorprendido por el hombre encapuchado con el filo de su katana apuntando al cuello de Kentaro.
¿?: ¿Quién eres tú y qué haces aquí?
Kentaro: ¡¡Demonios!!
Shion: No salió del todo bien…
Kentaro: ¡Responde tú primero! Viniste a matarnos ¿verdad? Tengo dos samuráis detrás de mí; si me tocas, estás muerto. Así que suelta el cuchillito y dialoguemos.
¿?: ¿Mataros? No seáis ridículo… Más bien debería ser yo quien hiciera esa pregunta tal como han venido a recibirme...
Kentaro: …… Sospechábamos que eras un asesino.
Shion: Mis más sinceras disculpas.
Kentaro: Pero si no tienes nada en nuestra contra, no tienes porqué temer.
¿?: ¿Asesino? ¿Por qué? (bajó el arma y les dejó entrar al cuarto para conversar)
Kentaro: … (guardó su arma) … Disculpa.
Souji: Perdonad. Teniendo en cuenta que aquí no simpatizan con samuráis, nos pareció curioso ver a alguien como usted.
¿?: ... Sé que parezco sospechoso con capa, pero tampoco puedo dejarme mostrar.
El hombre se quitó la capa y vieron que se trataba de un samurai de vestimentas León.
Souji “-Del León… cuidado…”
Kentaro: ¡¡León!!
¿?: Por eso no pude dejarme ver así como así.
Shion: Ahora comprendo.
Kentaro: Cuéntanos qué haces aquí, León.
¿?: Si estáis al tanto de lo que sucede, sabréis porqué.
Kentaro: En efecto algo sabemos, pero nos gustaría oír tu versión.
¿?: Vengo a hacer guardia por si desaparece más gente a causa de él.
Souji: ¿Él? ¿Quién es él?
Kentaro: Eso eso.
¿?: …………………… El jefe del pueblo… que en sus años fue un gran comandante León.
Kentaro: ¿Y por qué dices que es el causante de los desaparecidos? Explícate.
¿?: Hace aproximadamente más de un mes, cayó en sus manos un objeto que nunca debió ser encontrado...
Souji: ¿Un objeto?
Kentaro: O_O
¿?: Este objeto... desde que lo tiene, ha pasado todo esto... desapariciones de samuráis y gente inocente... los samuráis que lo apoyan ahora no son dignos ni de ser llamados samuráis.
Kentaro: ¿Qué objeto es ese?
Shion: Un objeto maldito ¿quizás?
¿?: Eso parece... Me gustaría poder arrebatárselo para deshacerme de él pero a pesar de ser alguien que está muy cerca suyo, no lo he conseguido...
Souji: ¿Cerca suyo? ¿Quién es usted?
¿?: Perdonad, no me he presentado. Me llamo Koji Akodo, y soy sobrino del jefe Taro Akodo.
Kentaro: Mmmmmmm…
Souji: ¿El sobrino? La gente te tiene por desaparecido.
Kentaro: Así que tú eres el sobrino desaparecido del que hablaban los aldeanos.
Koji: Sí... no quiero que mi tío sepa que planeo arrebatarle el arma y por eso me quedo con él en el fuerte que hay cerca. Prefiero que la gente me dé por desaparecido antes de desaparecer de verdad en manos de mi tío.
Kentaro: (cuchicheo) Aunque sea León, según los aldeanos, el sobrino no era mala persona. Tal vez podamos confiar en él.
Souji: (cuchicheo) A pesar de ello no confío en él por ser León. Pero si no podemos hacer otra cosa que confiar en él ahora…
Kentaro: ¿Pero qué aspecto tiene ese objeto? ¿Una katana?
Koji: Exacto... una katana que aparentemente es muy normal... pero a saber cuan poder tiene...
Shion: Pero… ¿arrebatar ese objeto no implicaría caer en esa maldición también?
Koji: … Poder maléfico… no entiendo porqué… Sería cuestión de cogerlo pero sin tocarlo con las manos desnudas.
Shion: Comprendo.
Kentaro: (cuchicheo) Roedor ¿qué dice tu olfato? ¿Es de confianza?
Shion: (cuchicheo) A mí me parece alguien sincero… pero toda nariz puede equivocarse.
Kentaro: ¿Son muchos vigilando el fuerte de tu tío?
Koji: Así que eso es lo que hay. Y vengo aquí de vez en cuando a vigilar la ciudad aunque sin mucho éxito. Hay varia vigilancia, sí. Pero si os ofrecéis a ayudarme, podría despistarlos desde dentro y así podríais entrar más fácilmente. Nadie sospechará de mí por ser quien soy.
Kentaro: Mi misión sólo era investigar, pero sería una deshonra para mi clan no hacer nada en una situación así. Te ayudaré.
Koji: Eso sí, si me veis dentro, haced como si no me conocierais. Cuando tengáis la espada os agradecería que me la entregarais.
Souji: ¿Cómo nos hacemos con la espada si está en manos de tu tío? (no paraba de mirarle con desconfianza)
Kentaro: todavía no confío tanto en ti como para darte esa espada. ¿Para qué la quieres? No le trajo ya bastante desgracia a tu tío?
Koji: Sois muy hábiles... No le he contado esto a nadie, pero bueno... Sé como destruir esa espada porque sé de dónde viene. Lo vi todo y cómo por error la espada cayó en manos de mi tío. Lo más rápido sería acabar con la vida de mi tío, a pesar que eso me duela mucho incluso pedirlo. Pero si no recapacita y os veis en una lucha... no habrá otra...
Shion: ¿Estás dispuesto a segar la vida de tu propio tío?
Koji: Aunque duela, prefiero eso a que muchas vidas inocentes se corrompan o desaparezcan... mira cómo está este pueblo…
Shion: En eso tienes razón.
Kentaro: ¿Y cuál es el modo de destruirla?
Koji: El modo de destruirla es dar con los maho que la crearon.
Kentaro: ¿Pero por qué deberíamos dártela? ¿Cuál es el secreto para destruirla? ¿Por qué no tirarla al océano y olvidarnos de ella?
Souji: Señor Hida, es un objeto mágico, si la tiramos al mar, podría ser encontrada igualmente y volver a lo mismo. El secreto es algo que sólo aquellos que saben de maho, pueden hacer.
Kentaro: ¡Carajo, es verdad! ¡Malditos!
Koji: Veo que estáis muy puesto señor Grulla.
Souji: Para bien o para mal, así es. No es un tema agradable de tratar. Pero si lo que pasa aquí es a causa de unos mahotsukai, tenemos que tener mucho cuidado. No me gusta la idea de aceptar algo de un León, pero lo haré porque sé que puede ir a más.
Kentaro: En todo caso, preferiría que si la conseguimos, mantener la espada alejada de ti… de momento. Espero que lo comprendas. Nos acabamos de conocer, aunque deteniendo tu cuchillo antes me demostraste que aparentemente eres sincero.
Shion: Hmm… Comprendo tus dudas acerca de él… pero cualquiera de nosotros podríamos vernos tentados por tal objeto.
Kentaro: En todo caso ya discutiremos eso cuando hayamos acabado la faena.
Koji: Entiendo ^^ yo también os acabo de conocer. A pesar de todo, no puedo hacer otra cosa que confiar en vosotros. El objeto, procurar no tocarlo con las manos desnudas.
Kentaro: ¿Cómo podríamos infiltrarnos en tu fuerte? No tenemos traje de León y aparte, no reconocerían nuestras caras.
Koji: Yo no me preocuparía mucho por si os reconocen o no... Todo el fuerte es corrupto, si os veis obligados a luchar y acabar con sus vidas, hacedlo. Ellos no tendrán piedad de vosotros. En el fuerte, en la parte lateral derecho hay una pequeña puerta camuflada. Por ahí podréis entrar sin problema.
Kentaro: ¿Cuántos son? No podremos hacerles frente si son muchos y nos vienen de golpe.
Koji: ¿En total? Haciendo vigilancia por la noche serán 20. Los demás estarán durmiendo. Para eso estoy yo dentro despistándolos.
Shion: Habrá que idear algún tipo de estrategia.
Kentaro: ¿Cómo llegamos al cuarto de tu tío?
Koji: La torre principal. Él está en lo alto de ella.
Souji: ¿Tiene vigilancia?
Koji: ¿La torre? No, y menos desde que mi tío se hizo con el objeto.
Shion: Entonces están confiados.
Kentaro: Y aparte de corromperle… ¿posee algún otro poder la katana esa? ¿Lanza fuego o algo así?
Koji: No, afortunadamente no hace eso.
Kentaro: Lo mejor sería pillar tres soldados de guardia, darles lo suyo y ponernos sus uniformes.
Souji: ^^U no quisiera ser grosero señor Hida, pero primero, me niego a ponerme traje León. Segundo, va en contra de mi moral disfrazarme... eso es más típico de los escorpión.
Kentaro: Kakita, no es cobardía ni deshonra ser precavido. Pero en fin, respeto tú decisión. Sería mejor que tú te ocupases de la retaguardia y observases si hay movimiento enemigo ya que serás el que más cantará.
Souji: ^^U creo que antes prefiero correr el riesgo de ir como voy… Además, yo no pego en el grupo ni disfrazándome... tengo el pelo típico plateado de los Grullas... Y Shion… (mira a Shion)
Kentaro: Shion… (mira a Shion)
Shion: Duh?
Souji: Es un nezumi. ^^U (momentos de silencio)
Kentaro: ¿Y si… simulásemos que lo llevamos como prisionero a ver al jefe? Nos colamos en su cuarto y ¡ZAS! Nos hacemos con la espada maldita. Con suerte no tendremos ni que matarle; lo pillaríamos desprevenido.
Shion: Oh… vaya…
Koji: No hacemos prisioneros.... ya pasó algo así hace tiempo y decidieron no hacer prisioneros. Ahora si cae uno lo hacen desaparecer directamente.
Kentaro: Mierda… Pues nada, vayamos a saco.
Souji: ^^U Pues sólo nos queda “asaltar” el fuerte…
Kentaro: No veo más opciones x_x ¿Cuándo lo haremos?
Shion: ¿Y una infiltración silenciosa? Si no hay tanta vigilancia…
Koji: Si es de noche, mejor; si os va bien hoy, mejor aún ^^ Contáis con mi apoyo desde dentro, recordarlo.
Kentaro: ¡¡VAMOS!!
Koji: Esperad un rato. Yo avanzaré para entrar antes. No quiero que sospechen de mí. Vosotros preparaos. Hasta luego.
Kentaro: ¡Espera pichón! ¿Cómo vamos a tu fuerte? No soy de estas tierras.
Koji: Oh, lo siento. Saliendo del pueblo, está recto al este; no hay pérdida.
Shion: No tiene pérdida, supongo.
Kentaro: De acuerdo pues, contamos contigo amigo.
Koji se puso la capa y se marchó.
Souji: Reconozco que hoy ha sido un día muy raro para mí. Por todo lo que pasa y por toparme con quien me he topado pero... me parece sorprendente que a pesar que diga que le duela, pida que matemos gente de su clan como si nada...
Kentaro: Sí, y esas prisas…
Shion: No sé si creerle ciegamente… pero parecía muy sincero.
Kentaro: No sé, no sé. Pero es lo que hay… No puedo volver con el rabo entre las piernas y decir que no hice nada.
Souji: De todos modos hay que parar estos sucesos de desaparición.
Shion: Quizás descubramos que hay algo más aparte de ese objeto.
Kentaro: Sí. ¿Tenéis guantes?
Souji: ¿Guantes? ¿Para qué?
Kentaro: Para la espada. Si cae en nuestras manos desnudas, nos corromperá. Y no sabemos cómo van a suceder las cosas.
Souji: Con alguna prenda bastará. La tapamos con ella y ya estará.
Kentaro: Si nos cubre completamente la mano, supongo que sí.
Shion: (a Kentaro) Te dejaré el honor de tomarla pues.
Kentaro: Sobretodo que no caiga en manos de la rata. JAJAJA, ES BROMA AMIGO.
Shion: Oh, no te preocupes. Como ya he dicho, te dejaré el honor de tomarla… No tengo la más mínima intención de caer preso de una extraña maldición.
Kentaro: Ni yo tampoco… Odio la magia, me parece de cobardes. Pero si no hay otra… Bueno, entonces ¿vamos ya?
Souji: Pues si no hay más que decir ni hacer aquí... ¿partimos a ese fuerte? Ah, señor Hida, que sepa la magia es buena ^^ siempre que sea benévola... recuerde que entre los samuráis hay shugenja, que usan magia...
Kentaro: Bah, bah… La espada es el camino.
Souji: No te lo negaré, pero no subestimes su poder…
Shion: A fin de cuentas, un arma no es buena ni mala; simplemente cumple la función que su dueño le da. Lo mismo ocurre con la magia…
Souji: Así es ^^
Kentaro: Siempre es de agradecer un sanador, eso es cierto.
Y mientras este nuevo grupo se preparaba para marchar al fuerte y recuperar el objeto maldito, Koji Akodo ya llegó, preparando la noche para que el camino de ellos tres fuera más ligero, sin problema y hacerse con esa katana.

6 comentarios:

Karura Blight dijo...

Wooh, les has puesto colores a cada uno de los personajes, qué chupi.

Y así empezó la odisea, qué recuerdos.

Belcoot dijo...

en tres palabras, peta a jierro xD sigue así, lo de los colores representa

Chiisa Yanagi dijo...

Los colores es muy acertado, así no "cansa" tanto.

Y sí, se hace muy corto para el tocho que parece ser, jaja.
Ahora es mi turno. :3

Hugo dijo...

Me he fijado que Kentaro Hida está muy obsesionado en demostrar que no es un cobarde. Souji hace bien en repeler a los Leones ¿tan mal se llevan? Souji siempre mostrándose tan educado e inteligente, pero siempre le da un punto de inocencia y es gracioso.
Kentaro es la mar de pueblerino, escandaloso y rompiendo cosas. Shion lo veo como alguien precavido, razón por la que pueda mostrarse poco conversador. Tengo curiosidad por él.
En este episodio cuando hablan ellos tres, parecen que vayan un poco a su rollo; me imagino a Koji con un goterón; cuchichean incluso delante de él como si no estuviera. Pero me ha gustado.

Anónimo dijo...

Interesante forma de interpretar en Rokugan, de entrada me ha chocado mucho ese trato tan cercano hacia la plebe, a ver que sucede.

Kizoku Nozomi dijo...

Por lo que tengo entendido, Hugo, el Clan del León y el de la Grulla se llevan un poco como perros y gatos, jaja.

Jose Luis, sí es cierto ese choque al ver ese trato cercano pero supongo que depende de la forma de verlo de cada uno a la hora de interpretar su personaje.
Además el Clan Cangrejo en ese aspecto nunca ha tenido problemas por su forma de ser.
De todos modos toda la historia no la veas como una estrictamente seria en cuanto a protocolo de comportamiento como pudiera tener la casta de samurais; sino a un aire más bien Anime, jaja.

Publicar un comentario