Déjanos un comentario

viernes, 22 de octubre de 2010 | By: Kizoku Nozomi

8º - Una lucha de honor y poder

Saludos a todos.
Al fin tengo el siguiente episodio listo para mostraros. Es más largo que el resto, pero no sabía por dónde dividirlo en dos partes para que uno no se viera tan corto.

La historia es bastante seria, pero tiene unos momentos muy peculiares. Admito que pasando a limpio la historia no he parado de reírme, y he agregado un detalle graciosillo por medio (enseguida lo vereis).

Espero y deseo que disfrutéis de este episodio. ^^



En el episodio anterior:
Tras adentrarse en la mansión encantada y resolver los misterios que allí se hallaban, lograron hacerse con otro objeto maléfico al acabar con el demonio que allí habitaba.
La casa desapareció y todos se vieron en medio de un claro del bosque mientras el día amanecía viendo cómo los niños, víctimas de la mansión, se despedían de ellos.
Ahora mismo tenían en sus manos dos objetos maléficos; una espada y un espejo de poder inconmensurable.

La Aventura: Una lucha de honor y poder


Souji: ¡¡Señor Hida!! ¡Espere! Deje que piense…
Aún estaban algo alterados por lo sucedido pero lograron calmarse.
Souji: Necesitamos que te curen, andas bastante herido… Pero Kosaten Shiro… seguramente está tomada por Akiko.
Kentaro: Tenemos que ir a por Akik… ¡Auch!
Kyoya: Normal… Siempre lanzándote sin cuidado… Patético.
Kentaro: ¿Qué? ¿Patético? ¡Qué tienes que decir tú! ¡No ayudaste para nada a rescatar a Tsukiya! Lo patético es un Ninja cobarde que no defiende a sus amigas.
Kyoya: Si dejas llevarte por las emociones y eres un sentimentalista, morirás el primero.
Kentaro: …… ¡Mierda! (Golpea el suelo haciéndose daño en la mano) ¡Auch!
Souji: Ya hay bastante… Todos tenemos la culpa… ^^UU Hida, tenemos que ir a curarle…
Shion: Sería lo más adecuado. ¿Hay un pueblo aquí cerca?
Kentaro se queda mirando al horizonte sin decir nada.
Souji: Al oeste de aquí debe estar Kaeru Toshi (L17), la Ciudad Capturada ahora siendo de León y Grulla por la alianza. Podríamos ir allí, quizás nos puedan ayudar. Además ahora tenemos el objeto que tanto buscan… Tenemos un punto seguro y le devolveremos muy bien el golpe a Akiko, pero antes necesitamos que te recuperes. Sólo espero que a Tsukiya no le hagan nada… ^^U
Shion: Probemos.
Souji: Señor Ninja… ¿Sería tan amable de escoltarnos hasta allí? Vigilar que no haya peligros delante. Nosotros llevaremos a Hida…
Kentaro: Espera, Souji, una cosa.
Souji: Dime.
Kentaro: En una de las notas de los niños decía que un poder oscuro había tomado la capital. Tal vez tenga algo que ver con Akiko… O con el hijo poseído del anciano, que también se nos escapó…
Souji: Señor Hida… ^^UUU Debería ponerse al día… Le explicaré.
Antes de que Souji dijera nada, el Ninja Kyoya Tatsuma fue veloz delante para procurar que no pasara nada diciendo.
Kyoya: No os detengáis ante nada.
Kentaro: ¿Tatsuma? Se ha vuelto a ir…
Shion: Veloz como el viento hmmm…
Souji: … ^^UUU Bueno, a lo que iba. El señor Daigotsu, el señor, mayor señor de las Tierras Sombrías, el Daimyô del Clan Araña de poder inimaginable, llegó a la capital Otosan Uchi y se hizo con ella como si nada… No sé cómo lo hizo… nadie lo sabe de hecho… Pero ahora eso está todo corrupto… Akiko no es nada comparada con él y ya ha podido con nosotros…
Kentaro: Ya veo Souji… Es extraño, todavía no he tenido noticias de mi fiel Sigfrido…
Kyoya apareció de nuevo: No hay nada que temer, es un camino seguro. Seguidme, sé cual es el camino.
Kentaro: Anda, volviste. Pues vale, sigamos al Ninja.

Souji y Shion se ofrecieron a ayudar a Kentaro a caminar, pero se negó comentando que podía caminar por sí mismo aunque fuera lentamente.
Al rato, el Ninja divisó por el camino que había mucha más gente, Grulla mayormente y muchos de ellos heridos, que se dirigían a la misma ciudad a la que iban ellos.
Pronto lo vieron los demás.
Kentaro: ¡Son Grullas! Menos mal… Deben ser supervivientes del ataque a la ciudad de los monstruos de Akiko.
Shion: Oh… Y son bastantes…
Souji: Seguro… Dichosa Akiko… La que ha montado ha sido buena… Vaya deshonra para los Daidoji…
Shion: ¿Por qué haría tal cosa, hmm?
Kentaro: Tal vez estuviese… ¿poseída? Lo mismo podríamos decir del sobrino… Su tío se sorprendió al ver cómo era realmente… Son casos parecidos. Por cierto, Souji. Era tu prometida, háblanos de ella.
Souji: ¿Tiene que ser aquí?...... En fin (suspira). Realmente nunca la he llegado a conocer del todo… Suele reservarse siempre varias cosas y sólo dejaba ver su buena imagen. No sé si ya era corrupta antes o no… Nunca me gustó que su personalidad pareciera esconder una sombra. Pero todos saben que es prepotente y aunque simule tener buena imagen, su pico deja mucho que desear muchas veces. No es como Koji que se hacía el bueno y era lo contrario… Es algo distinto… Siempre fue muy fría pero nunca imaginé que llegaría a hacer algo así…
Shion: Hmm… Fría y calculadora.
Kentaro: Esa impresión me dio cuando la conocimos. Y luego, la vi por la calle, y no sé, recuerdo que la cabreé y se indignó. Pero me hice el loco. Parecía una mujer histérica montando una escenita.
Souji: Lo que peor siento es que… Llegados a este punto, pueda ser alguien cruel de veras…
Kentaro: Yo creo que ambos, Akiko y Koji, no eran ellos mismos. Sólo son suposiciones, pero en fin…
Souji: No… Conozco a Akiko desde hace mucho… años atrás… Antes de que esto empezase… Siempre fue así… Sus padres también afirman que de pequeña era así… Creo de verdad que era la misma…
Shion: Entonces es muy posible que desde un principio ella ya tuviese esto en mente.
Kentaro: A ver, intentemos recordar cuando vimos a Akiko en el callejón. ¿Hubo algún momento en el que citara nuestros nombres? ¿Qué nos recordara?
Souji: Sí que nos conocía, ya sospechaba con tu voz, pero se paró al oír la mía. ¿A dónde quieres llegar?
Kentaro: A que tal vez, y sólo tal vez estuviera poseída por un demonio; que le poseyera en cuerpo y mente.
Shion: Hmmm……
Kentaro: Un demonio que busca los objetos desesperadamente… Sólo son conjeturas pero es lo que me viene a la cabeza. Lo que está claro es que también quería la katana. Cuando la saqué, grave error, pude ver su cara desencajada, mirándola con deseo.
Shion: ¿Alguien que la manipule?
Kentaro: Ahí está mi teoría. A lo mejor en esta ciudad podamos encontrar a alguien de la familia de Akiko que sepa más… Deberíamos investigar eso.
Souji: A ver… ^^UUU
Kentaro: ¿Conoces el lugar, Souji?
Souji: Sí, lo conozco.
Kentaro: Bien. ¿Y qué piensas de todo esto que he comentado?
Souji: Creo sinceramente que a Akiko no la controla nadie… Y me atrevo a decir que los mahos creadores de tales objetos, los dejaran a propósito para que los mismos humanos se corrompieran y pasaran cosas como las que estamos viviendo. Los humanos tienden mucho a desear tanto poder como para hacer tales locuras. Y sea como sea hay que pararles los pies. Hida, en cuanto se recupere, iremos derechos hacia Akiko. Ha hecho mucho daño a la gente, gente de mi clan, de mi familia y a Tsukiya…
Seguía caminando hacia Kaeru Toshi.
Shion: Oh vaya… Le acompañaré pues.
Kentaro: ¿Pero dónde puede estar?
Souji: Seguramente en Kosaten Shiro… divirtiéndose o buscando el objeto… Quizás nos busque a nosotros también…
Kentaro: Eso sería genial (se cruje los puños) ¡Auch! … ¡Vamos!

Todos llegaron al fin a las puertas de Kaeru Toshi donde dejaban entrar a muchos y los atendían. Kyoya Tatsuma se escondió entre las sombras mientras los tres samuráis se acercaban y eran interrogados por un bushi León.
Guardia León: ¿¿Quiénes sois??
Souji: Soy Souji Kakita y vengo acompañado de mi pequeño grupo, Kentaro Hida del Cangrejo y Shion ‘Agarra la pata’.
El guardia Grulla que había al lado se sobresaltó.
Guardia Grulla: ¡¿Cómo?! ¡¿Souji Kakita?! ¡¡¡El prometido de Akiko la corrompida!!! ¡¡¡Cuidado!!!
Fueron apuntados con armas, pero Souji se mostró más serio mostrando un rostro nada agradable.
Souji: Escucha… Hermano mío… ¬¬ Necesito que mi amigo Cangrejo se recupere, después nos iremos en busca de Akiko… No imaginas qué ganas tengo de darle su merecido por todo lo que ha hecho. ^^ No tengas a toda la familia de Akiko como cómplices por el simple hecho de ser familia. Eso sí es un grave error. ¿Nos dejáis pasar? ^^
Kentaro: Akiko fue quien nos traicionó.
Guardia Grulla: ¡Va-va-vale! n_ñ ¡¡Lo siento!! ¡¡Pase, pase!!
Guardia León: ………
Bajaron las armas. Kentaro se dirigió a ellos.
Kentaro: Oíd. Todos estos heridos… ¿Vienen de Kosaten Shiro? ¿O es que han ocurrido más desgracias?
Guardia León: Así es… Vienen de allí… Algo terrible sucedió anoche. Estamos al tanto.
Guardia Grulla: Por eso me puse así. ¡¡Lo siento!! ToT
Guardia León: Sé que hace días pasó algo más al norte en Tierras León… pero de los habitantes de allí no sabemos nada…
Kentaro: Ya veo, gracias.
Shion: ¿Podríamos comer y dormir un rato?
Asintieron y entraron.
Kentaro: Pues mientras me atienden con los demás heridos, vosotros id investigando a ver si encontráis algo como he dicho.
Souji: De acuerdo.
Shion: Está bien.

Kentaro fue atendido aunque no paraba de quejarse como un niño.
Doctor: Oh, por favor, un samurai como usted llorando como un niño. Cállese o no podrá ir a batalla.
Se calló y se puso serio. A los diez minutos volvió a estar igual.

Souji y Shion aprovecharon para nutrir un poco que ya les hacía falta según los curiosos rugidos de sus estómagos.
Mientras comían, vieron pasar un samurai Grulla corriendo hacia fuera como si hubiera sucedido algo.
Souji: ¿?... Shion, si has acabado de comer, ven, sigamos a ese grulla…
Shion: ¿Duh? (traga lo que tenía y le acompañó)
Salieron fuera siguiendo con cuidado al Grulla perteneciente a la familia Daidoji. Llegaron a una pequeña plaza donde se hallaban tres personas más, al parecer, importantes.
Souji se acercó lo suficiente para escuchar, a pesar de que fuera quizás una actitud grotesca, de qué hablaban los samuráis Daidoji, Doji, Asahina, y Matsu, siendo este último un León.
Daidoji: ¡¡¡Así que es verdad!!!
Asahina: Así es.
Matsu: ¿Alguien en Kosaten Shiro avisó a alguien de fuera? ¿Cómo? Todo está siendo atacado y nosotros que estamos cerca nos hemos enterado ahora sobre lo que sucede…
Doji: Eso me gustaría saber a mí… Asahina-san ¿cómo llegó a sus oídos?
Asahina: Ya sabe que soy shugenja y nosotros nos comunicamos con espectros y kamis… Vino uno a avisarme de ello… No es normal que hagan eso… Pero la persona que le invocó o debe ser muy fuerte o de mucha influencia o simpatía con los demás… Alguien importante…
Matsu: ¡¿Cómo?! ¡¿Qué shugenja de tal calibre andaría por ahí entonces?!
Daidoji: Quizás haya esperanza…
Asahina: No lo sé… Sólo sé que se está corriendo la voz…
Souji: … ¿Qué un shugenja mandó como mensajero a un kami y avisó al señor Asahina?
Dijo en voz alta haciendo que todos se enteraran de que él y Shion estaban allí. Les miraron.
Doji: ¿Qué tipo de maleducado nos escucha a espaldas?
Souji: Perdonad que lo haya hecho, pero si es verdad lo que habláis… Tengo razones para pensar que ese shugenja es alguien que conozco.
Matsu: ¡¿Cómo decís?!
Asahina pareció iluminarse: ¿De veras? ¿Quién es?
Souji: Su nombre es Tsukiya Agasha del Clan del Fénix.
Todos callaron de golpe.
Daidoji: ¿Agasha?...
Matsu: Los exdragón…
Asahina: Ya sería sorprendente que un Agasha pueda hacer eso…
Todos le miraron incrédulos, la familia Agasha no parecía ser muy bienvenida por el resto; eran bastante incomprendidos incluso dentro de su clan.
Souji: Aunque sea Agasha, no tiene porqué influenciarle el hecho de que su clan hubiera pertenecido antes al Dragón y sea muy distinta a sus ejercicios con la magia. Si demuestra ser alguien que vale, el resto de poco importa… Es una amiga que está ahí presa por querer curar al prójimo y ahora se deja la vida a riesgo de ser descubierta para enviar un kami…
Todos: …………
Asahina: Entiendo… Usted, Señor… (miró su mon) Señor Kakita, sí que ha sabido ver el lado bueno de esa persona. Si de veras es ella, mi visión hacia los Agasha cambiará. Pero por ahora no podemos hacer nada… Avisará a los demás… Pero va a costarnos mover todo un ejército para alguien como Akiko con onis a su lado estando la casa de Daigotsu tan cerca.
Souji: Bueno, aunque suene descabellado, yo y mis dos amigos iremos a rescatar a mi amiga. Si toca luchar, lucharemos…
Todos se sorprendieron: ¡¿Pero qué dice?! ¡Eso es una locura! ¡¡Con demonios de más de tres metros!! ¡¡Habiendo podido con toda una ciudad y muchos samuráis!!
Shion: Pero tampoco podemos quedarnos aquí sin hacer nada…
Souji: Por eso lo digo… Entonces les pillaron desprevenidos… Pero no os irá mal que un grupito distraiga un poco a ellos ¿no? Tener un berserker en el grupo les entretendrá bastante, más algunas hazañas nuestras. Vosotros mientras reunir el ejército… como dice mi amigo… No podemos quedarnos sin hacer nada… Vámonos.
Shion asintió.

A la vez que ellos dos marchaban, no paraban de pensar en la valentía y locura que mostraban.
Decidieron ir a ver a Kentaro y contarle sobre lo de Tsukiya.
Pasaron entre muchos heridos y allí estaba, mucho más relajado.
Souji: Señor Hida ¿cómo se encuentra?
Shion: Se le ve mejor cara.
Kentaro: Desde que el matasanos se fue, mejor. Ha sido horrible, preferiría recorrer diez mansiones encantadas antes que volver a pasar por eso. Pero ya estoy mejor. ^___^
Souji: Qué valor… xD
Shion: Oh, vaya, me alegro.
Kentaro quiso levantarse pero no podía sin quejarse.
Souji: No se levante, Hida, aún no está curado, y si se niega, le toco en la herida. ^^
Kentaro entre muecas se tumbó de nuevo.
Souji: Señor Hida…
Kentaro: Dime Souji…
Souji: Ehm… Bueno… pienso que Tsukiya está bien…
Kentaro: ¡¡¡¿ESTÁ BIEN?!!! (se reincorpora, quejándose de dolor de nuevo)
Shion: Eso parece…
Kentaro: Cuéntame, cuéntame.
Souji: Son sólo suposiciones.
Kentaro lo zarandeó.
Souji: Y-y-ya valeee.
Kentaro: Ay, perdón ¡Auch! (se tumba) Dime ¿qué has oído?
Souji: Escuché decir a unos samuráis, entre ellos uno era shugenja, que un shugenja desde Kosaten Shiro, envió a un kami como mensajero, por lo que se ha enterado una familia Grulla que vive lejos, y ahora estará corriendo aún más la voz…
Kentaro: ¡Desde Kosaten Shiro! ¡¡¡Tiene que ser Tsukiya!!!
Se levantó para ir a coger su zanbatô, pero Souji le tocó en una herida.
Souji: Acuéstese, no puede ir así. Le necesito al 100%.
Kentaro: …………… (indignado llamó a al doctor a gritos y vino)
Doctor: ¿Qué le ocurre?
Kentaro: ¡¡¡¡RÁPIDO, CÚREME YA!!!! (le tiró una bolsa con dinero) ¡¡ES MUY URGENTE, CORRA!!
Doctor: ñ__________n Por mucho que me pague, no puedo hacer milagros… Entiéndalo.
Souji: Hida… Además tiene que comer y dormir igual que nosotros. No seas inconsciente.
Kentaro: Souji ¿viste a una shugenja, no?
Souji: Un shugenja, Asahina.
Kentaro: Ellas tienen poderes de curación muy avanzados… A lo mejor ganaríamos tiempo si ella…
Souji: No todos curan. ^^U Señor Hida… Y le he dicho que es UN, no una…
Kentaro: Bueno, pero por probar. Llama a esa shugenja.
Souji: Bueno, iré a preguntar a ESE shugenja… ¬¬U Shion, vigila a este hombre, por favor. ^^UU Voy en bsca del señor Asahina.
Shion: Por supuesto, yo me haré cargo de él.

Paseándose por la ciudad, al final, aún entre tanta gente, logró dar con él.
Souji: ¡¡¡Señor Asahina!!!
Asahina: Oh, señor Kakita, es usted. ¿Qué desea?
Souji: Perdone las molestias, señor Asahina. Sólo me preguntaba si usted tendría la capacidad de curar con su magia… Mi amigo Cangrejo me lo ha pedido. Perdóneme… ^^UUU
Asahina: Oh, ya veo… No, no estoy especializado en curar a través del poder de los kamis… Lo siento.
Souji: No es nada. ^^U Gracias de todos modos.
Asahina: Pero… (se detuvo) Tenga, hágale tomar esto, le sentirá mejor para sus heridas también. (sacó un pequeño recipiente que contenía un líquido azulado) No se ven muchos de estos. ^^
Souji: Oh… ¿Pero… por qué?
Asahina: Porque a pesar de todo le echas valor a las cosas y estás dispuesto a salvar a una amiga. ^^ Espero que tu amigo pueda luchar a tu lado.
Souji: ¡Mu-muchas gracias señor Asahina! (hizo una reverencia y se fue yendo) ¡¡¡Que los kamis os bendigan!!!

Souji volvió junto a sus dos amigos.
Shion: Bienvenido de nuevo, señor Kakita.
Kentaro: … ¡Yo! ¿Cómo fue?
Souji: Hola. ^^ Bueno, que sepa que es un hombre y no tiene la capacidad de curar… Pero me ha dado esto para usted. ^^ Espero que le vaya bien.
Kentaro lo cogió y sin pensarlo dos veces, se tragó todo lo que había dentro pensando en curarse cuanto antes. Se tumbó esperando notar algo pero no notó nada.
Shion: ¿Cómo se siente, señor Hida?
Kentaro: Mmmm igual.
Souji: Bueno… espere un rato a ver. ^^UUU
Shion: Sí, puede que no sea de efecto inmediato, hmmm.
Kentaro: Shion, cuéntame cosas de tu pueblo. (vio venir al doctor hacia él) ¡No! ¡No se acerque! Bueno, espera. Va sí, rápido, haga lo que tenga que hacer. ¡Rápido, rápido! (cerró los ojos apretando los puños)
Shion: “-Cualquiera diría que es un tipo que se lanza a lo loco contra el enemigo…”
Doctor: Vaya… parece estar mejor de las heridas… hmmm… Pero le noto mucho más cansado que antes… Quizás necesite dormir. (miró a Shion y Souji) Vosotros también deberíais dormir…
Kentaro: Buenas noch… zzZZZZzzzzZZZzzz
Shion: La verdad es que deberíamos descansar, sí.
Souji: Sí. ^^U ¿Hida? ¿Se durmió?
Shion: Y sin necesidad de su botella, hmmm.
Kentaro: ZZzzzZZZ
A pesar de que la noche no llegó y aún quedaba para que asomaran las estrellas en el cielo azul pintado de negro, Souji y Shion de repente notaron cómo sus cuerpos empezaron a pesar cada vez más. El cansancio se había apoderado de sus cuerpos.
Souji: Ah… pe-pero… porque… no.. me… aguan…………
Shion: De repente me… sien… to muy… cansado……
Ambos cayeron al suelo, y al igual que Kentaro, se quedaron profundamente dormidos.

Un paisaje de colores en el que la energía emergía por todos lados empezó a mostrarse.
Una curiosa figura se hallaba allí en medio mezclándose con el paisaje sin dejarse ver con claridad. Aquella extraña gran criatura asomó por allí, parecía estar dando un paseo.
De repente, unos susurros provenientes de una voz tranquila y muy profunda, dijo:
- Necesito de su fuerza… Hacedla despertar…

Todos despertaron algo desconcertados y a su vez descansados.
Kentaro: Pfff, qué sueño más chungo he tenido…
Souji: ¿¿¿Do… Dónde estoy???
Miró a su alrededor y supo que aún estaba en Kaeru Toshi por ver a sus hermanos Grulla en aquel sitio, heridos y siendo tratados. Pudo comprobar también que estaba a punto de anochecer.
Shion estaba a su lado.
Shion: ¿Dónde… qué ha pasado?
Souji: No lo sé… Nos dormimos de repente…
Shion: Sí… Recuerdo que de golpe me sentí muy cansado y ya nada más.
El doctor se dirigió a ellos dos.
Doctor: ¿Estáis bien ya? Caísteis redondos… Deberíais estar realmente agotados. Pero ahora parecéis estar muy bien. ^^
Souji: Bien… y el señor Hida ¿está en su cama?
Doctor: Sí… parece que también despertó y… Está notablemente mucho mejor…
Souji: Vaya, de veras funcionó… ¿Vamos Shion?
Shion: Sí, es capaz de irse sin nosotros.
Fueron al cuarto consiguiente viendo a Kentaro ya de pie y listo para partir.
Kentaro: … ¡Yo! ¡Iba a buscaros! ¡Vayamos, va!
Souji: Vaya… sí que le sentó bien dormir. ^^UUUU
Doctor: (se dirigió a Kentaro) Procure no herirse de nuevo. Está muy bien pero no está recuperado del todo.
Souji: Bueno, señor Hida ¿Está dispuesto a ir? No será fácil ir a rescatar a Tsukiya…
Kentaro: Vamos, vamos. (salió por la puerta)
Shion: Le sobra energía, hmmm.
Souji: Por favor, no sea brusco e impulsivo yendo al cuello de todos… Nos interesa Tsukiya… ^^UU
Kentaro: Sí, si quieres le doy los buenas días a Akiko… U_u (mira a Shion) Shion… Ya has hecho más que de sobra… ¿Por qué no esperas aquí? No sé qué veremos ahí fuera.
Souji: ^^U. Hida, necesitamos fuerza de Shion también. No sea inconsciente. No somos más que bushis de primer rango.
Shion: Oh, vamos… ¿pretende dejarme ahora aquí tirado?
Kentaro: Lo que no quiero es que salgas herido, te debo la vida.
Shion: Si muero en combate es porque he decidido morir en combate, no se preocupe por ello.
Kentaro: … ¿Y tú, Souji, estás decidido?
Souji: ¿Por quién me toma? ^^UUU No me importa lo que haya, tengo que acudir a Tsukiya.
Kentaro: Pues vamos. Mmmm, no sería mala idea tomar unos caballos, nos llevaría menos. Cuando estemos cerca de Akiko o donde esté ella, iremos a pie. Por supuesto no seguiremos los caminos y no usaremos ninguna luz.
Souji: Está bien… hablaré para que nos presten tres caballos. Aunque ya que estamos con esas, mi idea era entrar a escondidas a buscar a Tsukiya.
Shion: Sería lo más prudente, hmmm.
Kentaro: Entonces no podemos perder de ninguna manera.

Salieron, Souji consiguió prestados tres caballos. Todos se despidieron del doctor y se dispusieron a subir a ellos. Sin embargo Shion, miraba con recelo al caballo, estando éste bastante nervioso.
Souji: ¿Shion? ¿Qué ocurre?
Kentaro: JAJAJAJAJA, se ve que los nezumi no simpatizan con los equinos.
Shion: Oh, nada… la verdad es que nunca me… gustaron estos… animales.
Souji: ^^UUUU Aguante un rato en él… sino te quedarás atrás.
Tras unos malabares, Shion consiguió montar en su caballo.
Cabalgaron a buen ritmo hacia Kosaten Shiro, aunque nuestro amigo rátido se quedaba atrás peleándose con el equino.
Tras dos horas de recorrido, ya tenían a la vista la ciudad. Bajaron de los caballos, Shion se cayó al suelo.
Souji: ¿Shion? ^^UU
Kentaro: ¡¡Shion, ¿estás bien?!! (se aguantaba la risa)
Shion: Oh, no es nada… gracias. (mira con recelo al caballo pensando que le había tirado)
Y, siguiendo a Souji, se dirigieron a la casa principal de los Daidoji para entrar por el patio, detrás de la ciudad.
Kentaro: ¿Allí estará Tsukiya?
Souji: Conociendo a Akiko… ^^U Tiene que estar ahí sí o sí.
Shion: Pero seguramente esté fuertemente vigilada ¿verdad? La verdad es que la cosa no es nada fácil, hmmm.
Kentaro: Nada, lucharemos con lo que podamos.
Souji les guió a un gran árbol por el que podrían trepar para entrar dentro del patio de la casa principal.

Llegaron sin problema, trepando con gran habilidad. No escucharon ningún ruido, pero al mirar al cielo, lo vieron repleto de nubes negras y moradas que no dejarían pasar un rayo de sol siendo de día.
Souji: Hida, mire el cielo…
Kentaro: Madre mía ¡esto es antinatural!
Shion: Vaya…
Souji: Temo que sea en parte por los onis y la gran energía malvada que haya aquí… Aquí dentro no debe haber nada bueno… nada humano…
Kentaro: Tsukiya tiene que estar viva…
El ninja, Kyoya, andaba muy cerca de ellos.
Viendo el patio, no divisaban nadie, estaba vacío.
Souji: ¿No hay nadie? Qué raro…
Shion: Demasiado sospechoso.
El ninja se apareció ante ellos de golpe sobresaltándoles un poco.
Kentaro: Tatsuma, esa costumbre tuya de aparecer de repente me pone de los nervios…
Kyoya: He podido ver dentro de la casa a un grupo de samuráis con Akiko.
Souji: Gracias ninja… ^^UUU
Kentaro: Así que está aquí… Vamos. Busquemos a Tsukiya.
Empezaron su trayecto dentro de la casa, pero Kentaro hizo suficiente ruido con su armadura como para alertar a un samurai Grulla.
Bushi: ¿¿Qué fue ese ruido??
Souji preparó su arco. El bushi abrió una puerta y salió, pudiendo ver a la lejanía a todos ellos. Sin más, Souji disparó en la cabeza de aquel samurai acertando sin problema.
Souji: No podemos ser vistos… (miró a Kentaro)
Kentaro: Sí, sí, seré más sigiloso… (fue con cuidado y cogió el cadáver para esconderlo y nadie lo viera)
Souji: Bueno, sigamos.
Pero al poco Shion pisó una madera que crujió.
Souji: ^^UUUUUUUUUUU.
Guarda1: ¿Oíste algo?
Guarda2: Hmm, me parece que sí… venía cerca ¿no?
Shion: (susurro) Maldita sea…
Todos se prepararon. Escuchaban cómo se acercaban unos pasos hacia ellos pero antes de que pudieran hacer algo, Kyoya se posó hábil y sigilosamente a las espaldas de ambos guardias hiriéndoles al cuello mortalmente. Cayeron al suelo sin emitir ningún ruido alarmante.
Kyoya: Sigamos.
Sin mediar palabra, continuaron con su búsqueda siendo lo más silenciosos posible.
Iban por un pasillo en el que había puertas en ambos lados con muchas habitaciones contiguas cuando de pronto, Shion, ‘amante’ de los caballos, se percató de que tenía un pelo de su equino que empezó a molestarle en la zona de la nariz. Era tal la molestia que le incitó a estornudar con fuerza; una fuerza que le empujó hacia delante chocándose a las espaldas de Kentaro que sobresaltado por ello, perdió el equilibrio y cayó al suelo causando un gran estruendo. Casi sin poder reaccionar, todas las puertas de todos los cuartos se abrieron dejando a la vista un gran número de samuráis Grulla.
Souji: ^^UU………………………
Kyoya: ……………………………
Shion: u_u ………………………
Kentaro: O_o …………………


"Aho, aho!" (Idiota, idiota!)


Samuráis: ¡¡¡¡INTRUSOOOOOOOOOOOOOOOOSSS!!!!
Todos los samuráis fueron hacia ellos que sin pensarlo más echaron a correr al ver la cantidad de samuráis que eran.
Shion: Definitivamente, hoy no es mi día.
Corrían de un lado a otro sin tener un destino fijo. Souji era bastante veloz, pero el miedo de Shion le hizo superar en velocidad dejando a la Grulla atrás.
Souji: ¡¡Señor Hida ¿dónde sugiere que vayamos?!! No podemos estar corriendo todo el rato.
Kentaro: ¡¡TSUKIYA!! ¡¡SI NOS OYES DI ALGO!!
Souji: …………… “-Vaya éxito de misión sigilosa…”
Cada vez eran más samuráis los que se unían a la ‘caza’.
Souji: Aunque pudiésemos derrotarles de uno en uno… ¡siguen siendo muchos!
Kentaro: ¡¡NINJA ¿TIENES BOMBAS?!! ¡¡Úsalas por nuestro bien!!
Kyoya lanzó bombas de humo hacia los samuráis.
Souji: “-Si no le dicen nada, no lo hace… ^^U”
Samuráis: Cof, cof… ¡¡qué demonios!! Cof cof ¡¡Id a por ellos, ID!! ¡¡Aunque no veáis nada!!
Algunos de ellos cayeron al suelo.
Kentaro se dispuso a pasar cuentas con los samuráis aprovechando el humo, pero un extraño temblor, le despistó.
Kentaro: ¡Qué…!
Empezaron a escuchar un gruñido.
Shion: ¿¿Qué… qué ocurre??
Samuráis: (gritando) ¡¡Que vieneeeee, dejarle camino libreeeee!!
Kentaro se preparó para lo que estaba por venir. Se oían fuertes pasos pasar entremedio de los samuráis; algunos desafortunados acabaron aplastados.
Souji: ¡¡Hida, no sea idiota!! ¡¡Apartémonos del camino!!
Los tres se apartaron justo cuando enfrente de ellos pasaron esos prominentes pasos viendo cómo pasaba de largo lo que parecía una especie de ogro de cuatro metros que iba algo agachado y destrozando gran parte de la casa.
Souji: … Esto… ¿Qué fue eso?
Shion: Era… enorme…
Souji: Como si fuesen dos Hida juntos. ^^UUUU
Kentaro: Dios mío, ese monstruo estaba loco…
Shion: Quizás es la oportunidad de buscar sin preocuparnos de hacer ruido.

Vieron un pobre samurai arrastrándose por el suelo y al cual nuestros amigos no dudaron en interrogar. A pesar del tono y la rudeza amenazante del Cangrejo, se negaba a desvelar el paradero de Tsukiya hasta que pudo comprobar que resistirse a responder podría ser peor. Anunció que andaba fuera de la casa con Akiko al descubrir que ella mandó un kami como mensajero.
Salieron disparados hacia fuera para encontrar a Akiko.
A medida que llegaban a la salida de la casa, oían claramente su voz.
Akiko: ¿Ya te quedaste a gusto matando a esos pobres samuráis? ¡¡Muy bien!! Así podré obtener más poder, jajaja…
Souji: Estamos corriendo hacia ella… pero sin contar con el ogro y que pueden haber demonios y samuráis ¿alguien ha pensado en eso? (decía corriendo sin detenerse)
Kentaro: Es ahora o nunca.
Akiko: Bien, ahora tú… ¡¡Dime cómo hiciste para enviar un Kami como mensajero!! (se escuchó una bofetada) Ahora vendrán muchos aquí… Aunque puede que quizás sea divertido, jujujuju.
Souji: ……

Al salir vieron la ciudad casi toda destrozada y allí en medio del claro, la zona central de la ciudad, estaba Akiko delante de Tsukiya a la que sujetaban dos samuráis. Alrededor asomaban algunos demonios de tres metros como los que vieron la última vez.
Al finalizar las escaleras de la entrada principal de la casa había más guardas y enfrente de ellos el ogro que estaba a tan sólo veinte metros de Akiko. Todos estaban pendientes de Tsukiya.
Akiko: ¡¡Respóndeme!! (le dio otra bofetada a Tsukiya, tan fuerte que le obligó a escupir sangre) ¡¡No me creo que una don nadie como tú haga esas cosas!!
Tanto Kentaro, Souji y Shion, aprovecharon que no estaban atentos para tensar los arcos y poder disparar a Akiko; con un poco de suerte, acabarían antes de lo que pensaban.
Lanzaron sus flechas al unísono, y, a excepción de Shion, que dio al samurai del lado izquierdo de Tsukiya, Kentaro y Souji acertaron en la espalda de Akiko.
Akiko: ¡¡¡¡¡¡¡¡KYAAAAAAAAHHH!!!!!!!! ¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿QUIÉN????!!!!!!!!!
Se giró con una diabólica mirada.
Akiko: ¡¡¡¿¿¿VOSOTROS???!!! ¡¡TODOS A POR ELLOOOOOOOOOOOOOOSS!!
Kentaro: (sacando su zanbato y corriendo como loco hacia Akiko) ¡¡¡¡¡¡TSUKIYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!
Kentaro vio bloqueado su paso por los guardias, pero no le importaba, con su zanbato los iba echando fuera de su camino.
Souji: Akiko… no te saldrás con la tuya…
Akiko: Así que al final apareciste, Souji… ¿a por tu amiga? ¡¡¡JA!!! Permíteme decirte que no es buen momento para interrumpir. (cogió con fuerza a Tsukiya por los pelos)
Souji sin dudarlo dos veces lanzó otra flecha que iba directa a ella, pero que consiguió detener con una especie de magia.
Akiko: Tú lo has querido. (miró al otro samurai que tenía sujeta a Tsukiya) Derríbala.
Vieron cómo aquel samurai tiró a Tsukiya al suelo y empezó a golpearle; una visión y unos actos totalmente inapropiados para un samurai.
Aquello pareció enloquecer y enfurecer a Kentaro y Souji que sin cesar de gritar su nombre, hacían cuan podían para llegar cuanto antes a ella.
Kentaro: ¡¡¡¡TSUKIYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!
Souji: ¡¡Tsukiya!! ¡¡¡TSUKIYAAAAAAAA!!! ¡¡¡DEJAD A TSUKIYA!!!
Souji se unió a Kentaro para sobrepasar a los guardias. Shion también fue a ayudar.
Los guardias, hicieran lo que hicieran no tenían nada que hacer frente a ellos que con gran destreza y agilidad los conseguían bajar notablemente.
Souji: ¡¡DEVOLVERNOS A TSUKIYAAAA!!
Shion: Debemos darnos prisa…
Kentaro: LARGO DE NUESTRO CAMINO.
Akiko: Vaya, vaya… Vienen con fuerzas… (miró a Tsukiya a la que aún estaba recibiendo golpes)
Un guardia logró alcanzar a Souji, pero su cólera era mayor como para poder centrarse en el dolor.
Souji: ¡¡Maldición!! ¡¡AKIKO, QUIERO TU CABEZA!!
Shion: Esto se alarga demasiado… debemos apresurarnos…
No había que olvidar que tras los guardias estaba el ogro y los demonios.
A pesar de que aún quedaban guardias, tenían un espacio libre por el que no dudaron pasar y correr hacia Akiko aunque delante se presentó el ogro de cuatro metros.
Souji: ¡¡Pasemos del ogro, hagámosle heridas pasando corriendo por su lado!! ¡¡Shion, tú a la izquierda, Kentaro ve por el centro, yo iré por la derecha!!
La brillante idea de Souji se llevó con éxito, el ogro gritó de dolor y cayó de rodillas. Sin embargo zarandeó los brazos alcanzando a Souji y Shion tirándoles al suelo.
Souji: Aaaaghhhhhh…… ¡¡Tsukiyaaaaa!! (se levantó como podía)
Shion: Ahh… ¡Debemos seguir!
Akiko: (sonrió) Jajajaja, JAJAJAJA, hay que ver lo estúpidos que sois los humanos…
A pesar de que Akiko viera cómo Kentaro iba directo a ella, éste consiguió asestarle en su hombro izquierdo. Normalmente le habría hecho daño o incluso matado de un golpe, pero Akiko se estaba protegiendo con el ‘maho’ y la sangre que había en ese momento.
Akiko no dudó en usar una magia contra Kentaro. No le hizo daño alguno, pero le causó que temiera todo lo relacionado con el maho. El efecto de la magia le hizo retroceder y alejarse de Akiko, temiéndola.
Akiko: JAJAJAJAJA ¡¡¿Ahora qué?!! ¡¡¡Te has paralizado!!!
Kentaro: …………
Souji fue veloz hacia Kentaro empujándole y haciéndole caer al suelo.
Souji: ¡¡KENTARO!!
Gracias a eso, Kentaro pudo moverse, pero aún temía a Akiko.
Kentaro: … que… que… que… d… demo… nios…
Souji: ¡¡¡Déjame a esta bruja para mí!!! ¡¡Tú rescata a Tsukiya!!
Sin pensar ni mirar a Akiko, Kentaro se dirigió hacia aquel samurai.
Kentaro: ¡¡¡SUELTALAAAAAAAAAA!!!
Souji: ¡¡¡Akiko!!! ¡¡PREPÁRATE PARA MORIR AQUÍ Y AHORA!! (le señaló con la katana)
Akiko: Bah, no sé porqué tanta movida por una miserable… Siempre prestabas más atención a ella que a otra… como a mí… pero ju, no me importa… mira donde he llegado, jujujujuju.
Souji: … Esto no es sólo por Tsukiya… ¡¡¡Has traicionado a los tuyos!!! ¡¡¡A tu familia!!! ¡¡Eso es una deshonra!! ¡¡Usando Maho!! ¡¿Es a eso a lo que querías llegar?! ¡¡¡No hay palabra ahora que pueda describir lo que has hecho, sucia bruja!!! ¡¡¡Te mataré!!!
Akiko: … así que después de todo… ¿serás capaz de matarme? JAJAJAJA.
Shion: “-Duh… qué mujer más terrorífica.”
Sin que Akiko pudiera reaccionar, se sorprendió de la velocidad y seguridad que tuvo Souji al ir contra ella e hiriéndole.

Al mismo tiempo, Kentaro estaba librando una lucha contra el otro samurai que dejó a Tsukiya muy malherida.
Kentaro: ¡¡PAGARÁS LO QUE HICISTE!!
Ambos se daban el uno al otro con ímpetu y muchas heridas superficiales asomaban por doquier hasta que finalmente Kentaro logró dar el golpe de gracia.
En lugar de mirar cómo estaba Tsukiya, se dedicó a ir hacia cualquier enemigo que se moviera.
Shion: ¡¡Señor Hida, atienda a Lady Tsukiya!! (decía atento a la situación y enfrentándose a guardias)
Kentaro: ¡¡Ostia, sí!! ¡¡Que me he emocionado!! (fue hacia ella cogiéndola entre sus brazos) ¡¡¡Tsukiya!!! ¿¿¿Estás bien???
Pero ella no respondía, estaba totalmente inconsciente. Le cogió de una mano pero ésta cayó como si estuviera muerta. Dejó a Tsukiya de nuevo para acabar con todos allí, furioso y afectado por ello.

Souji no echaba atrás y no dudaba, su objetivo era la cabeza de Akiko.
Akiko: “-Sorprendente… me va a matar en serio.”
Souji le hirió de nuevo pillándole por sorpresa.
Akiko: ¡¡KYAH!! ¡¡Me pillaste desprevenida!! (se puso a una distancia considerable y desenvainó su katana) Está bien, solucionemos esto a tu modo, pero recuerda que tengo mucho poder ¡¡aquí y ahora!!
Empezó una feroz lucha entre los prometidos, tan opuestos como la luna y el sol, luz y oscuridad, cielo e infierno. Luchando por honor y poder; para salvar y destruir.
Conseguían herirse, algunas heridas eran muy profundas, pero no tan dolorosas como la que sentía interiormente Souji.
Akiko gritó dolorida: ¡¡¡¡¿Cómo puede ser?!!!! “-Es demasiado bueno…”
Souji: ¡¡¡No me importa cuánto me des, PAGARÁS POR TODO LO QUE HAS HECHO!!!
Se escuchó el choque de ambas katanas, resistiendo y estando atentos. Un movimiento en falso podría ser el fin del otro.
Souji aprovechó el impulso de ella para asestarle exitosamente.
Akiko sangraba y gritaba, pero el odio le cegaba y quería seguir para derrotar a Souji, pero no consiguió nada. Su cuerpo fue debilitándose por momentos.
Akiko: Argh… no… Cómo puede ser… Yo tenía que ser la más fuerte… y… estar al lado del señor… Daigotsu…
Souji: ¿Daigotsu? Lo siento mucho Akiko, pero no puedo esperar que se te dé una oportunidad porque no te perdonarían jamás… Voy a acabar con esto de una vez. Hasta siempre.
Con un golpe limpio y un trueno acompañando el momento, separó la cabeza de Akiko de su cuerpo. Salió rodando mientras su cuerpo yacía en el suelo sangrando.
Souji sólo sentía un profundo silencio y tardó unos momentos para relajarse y guardar su katana.
Los guardias se asustaron; el ogro no sabía qué hacer. En cambio los demonios se dirigieron deprisa hacia Kentaro, Shion y Souji. Kentaro, sin importarle lo más mínimo su seguridad, fue a por un demonio.
Souji: …………… (miraba el cuerpo inerte sin saber cómo reaccionar)
Shion: (se puso delante de Souji) ¡Señor Kakita! ¡Los demonios se acercan!
Souji: … Lo sé… pero… ya no tengo fuerzas para nada más… Tsu… Tsukiya… (se dirigió hacia Tsukiya) Tsukiya… Despierta…
Mientras, Kentaro y Shion hacían cuan podían contra aquellos demonios. Uno procuraba no salir herido, el otro le despreocupaba su situación.

El cielo pareció repentinamente parpadeando con fuerza.
Desde un lado de la ciudad vieron cómo bushis Grulla y León venían corriendo y dispuestos a luchar contra aquellos demonios.
Todos: ¡¡Recuperemos la ciudaaaaaaaaaaad!!
Shion: A buenas horas…
Souji: Gracias a los kamis… ^^
Todos batallaban y rápido acudieron a su lado.
Bushi: ¡¡No os preocupéis!! ¡¡Hemos llegado!!
Asahina se dirigió hacia Souji.
Asahina: Vaya, en menudo lío te has metido… Pero parece que has estado trabajando duro… Después de esto ya hablaremos.
Se fue a luchar mientras Souji le sonreía como podía.
Kentaro y Shion se sintieron mejor con esa compañía para poder abatir a los demonios. Ahora tenían más probabilidades de ganar y de no recibir golpes.
Empezaron a caer varios demonios, pero ellos también causaban daños y aún quedaban muchos.
Bushi: ¡¡AAAGH!! ¡¡Esto no se acaba, nos están dejando sin…!!
Transcurrieron unos cuantos minutos más, tanto Oni como bushi caían muy mal heridos, otros morían.
Del cielo empezaron a caer rayos de color verde Jade sin que nadie se lo esperase. Aquellos rayos cayeron todos sobre los demonios; uno tras otro hasta que cayeron.
Samuráis: ¡¿Cómo?! ¡¡¿De dónde vienen esos rayos de Jade?!!
Kentaro y Shion, también sorprendidos, observaron que desde el otro lado de la ciudad, dirección norte, empezó a asomar un ejército Fénix liderados por una yojimbo acompañada de bushi y varios shugenja.
Kentaro: F… Fénix… (sin pensarlo más fue junto a Tsukiya)
Shion: ¡Parece que esto está ganado! (acompañó a Kentaro)
Samuráis: ¡¡¡Oh, del clan del Fénix!!!
Todos los demonios acabaron desapareciendo y se encargaban de que ninguno saliera impune ahora mucho más rápido gracias a la nueva ayuda.
Mientras todos celebraban la victoria, Asahina se dirigió hacia la yojimbo.
Asahina: Si es Miko Shiba.
Miko: Hola… (hizo una reverencia)
Asahina: ¿Cómo habéis llegado hasta aquí…? ¿Cómo sabíais…? Puede que…
Miko: Por el kami de mi amiga Tsukiya. ¿Dónde está? (mostraba un carácter muy serio)
Asahina la llevó hacia ella, acompañada de sus tres amigos que no sabían qué hacer.
Kentaro: ¡¡Salvad a Tsukiya, por favor!!
Shion: ¿Cómo se encuentra lady Tsukiya?
Miko les miró fijamente.
Miko: Tsu… Qué te han hecho… (miró al resto, dirigiéndose a Asahina) Que sepa que sin ella ninguno de nosotros habríamos tomado esta ciudad de nuevo… Y menos tan pronto...
Asahina: …… Entiendo…
Mientras, otros miraban el cuerpo muerto de Akiko sin su cabeza.
Bushi: Alguien ha matado a Akiko… O.o
Souji: (sin girar la cabeza) Fui… Fui yo…
Asahina: Pues sí que hiciste un buen trabajo…
Miko: Dejémonos de palabrería… Permitirme. (cogió a Tsukiya) Necesita cuidados ya, los amigos de ella… mejor que vengan conmigo también. Lo que tengáis que decir sobre las heroicidades de ellos, que sea cuando estén en condiciones. (hizo otra reverencia) Nos vemos.
Y se puso en marcha yendo por donde vino.
Souji también se despidió de Asahina y comenzó a seguir a Miko Shiba.
Shion: Oh, vaya…
Hizo lo propio, educadamente despidiéndose y reuniéndose con Souji. Kentaro se fue con ellos sin despedirse de los demás, todo el rato miraba a Tsukiya.
Y mientras se iban con el ejército Fénix, las nubes del lugar dejaron paso a los primeros rayos de sol de un nuevo día.
Los Grulla y León estaban orgullosos del trabajo que hicieron ellos tres, pero no tuvieron ocasión para agradecérselo en persona.

2 comentarios:

Chiisa Yanagi dijo...

Pues yo, qué quieres que te diga... hasta se me ha hecho corto. xD
Eso es que es intenso!!!
La verdad es que los dados no favorecieron nada a Shion. xDDDDDDDD
Pobreto, pero la panza' de reir que nos dimos fue fina.

Además cuando ya llegáis a ver a Akiko, la cosa se pone interesante y emocionante. >:3
¡¡sugoi!!

Hugo dijo...

Sin duda, el estornudo de Shion ha sido lo mejor.
Me gusta esa mezcla de seriedad y humor de la historia. La batalla Souji contra Akiko, es espectacular, llena de sentimiento. Sólo falta verla versión manga o anime.
Presiento que el personaje de Miko Shiba me va a gustar bastante.

Publicar un comentario